Pánico. Pensar en subir a un avión me aterrorizaba. No pude nunca identificar muy bien miedo a qué era: que se caiga el avión? querer bajarme y no poder? claustrofobia?…
El día que con mis compañeros de primaria votamos democráticamente cómo volver del viaje de egresados creí que moría al ver que avión era la opción ganadora. Estuve toda la semana en Córdoba sufriendo pensando en el momento que iba a tener que subirme a ese maldito medio de transporte. Fue horrible: subirme, despegar, todo el viaje en sí, y el temido aterrizaje… por Dios, no podía disfrutar de nada!

Pasaron los años y me picó el bichito de querer viajar. Empece a averiguar sobre los Work & Travel y surgió la idea de ir a trabajar a Walt Disney World. Esta vez, me anticipe y fui a ver a una médica naturista (psicóloga también) que me recetó unos “globulitos” (remedios homeopáticos) para tomarme antes de cada vuelo. El viaje de ida estuve hiper ansiosa, pero no la pasé tan mal como en la experiencia anterior. Llegué a Estados Unidos y viví cuatro meses alucinantes. Cuando llegó la hora de volver a Argentina, ni se me cruzaba la idea, ya no había rastros del miedo a tener que volar. Santo remedio! Viajar me curó! De hecho, disfruté muchísimo del vuelo inclusive habiendo tenido terribles turbulencias (las cuales eran totalmente nuevas para mí). Los globulitos? Ni me acordé de tomarlos!!!
A partir de ahí hubo un antes y un después en mi vida. Hoy estoy redactando esta nota en un avión volviendo de Bariloche, volando sola. Me manejo en los aeropuertos como “pancha por mi casa”. Disfruto de la adrenalina del pre-viaje. Amo la sensación del despegue y del aterrizaje, como cosquillitas en mi estómago. Me veo sonriendo y escribiendo esto con la carita pegada a la ventana, mirando las turbinas y las nubes que acompañan el paisaje… me doy una palmadita en la espalda.
Estoy tan orgullosa de mi. Ya viajé muchas veces sola, por placer o por trabajo, y si estoy varios meses sin volar me empieza a agarrar una necesidad imperiosa por subirme a un avión.
¿Me estaré volviendo adicta?
1 comentario en “Viajar y vencer el miedo a volar!”
Excelente